8 Excursiones en Roma para un viaje inolvidable

El pasado cobra vida en cada uno de los rincones de la capital de Italia. Monumentos, historia y restos arqueológicos se confunden a diario con el ritmo frenético de la ‘Ciudad Eterna’. Las excursiones en Roma son auténticos viajes en el tiempo en los que el visitante puede recorrer las ruinas de un templo milenario y hacer compras en las tiendas de moda más famosas del mundo sin necesidad de cambiar de calle.

Estas son algunas ideas para no perderse lo más destacado de la ciudad y de sus alrededores.

1. Visita guiada por los Museos Vaticanos y Capilla Sixtina

Una de las ventajas de las excursiones en Roma con guía es que no son necesarias las largas colas y esperas habituales en los monumentos con mayor afluencia de turistas. Las visitas guiadas a los Museos Vaticanos y la Capilla Sixtina forman parte de esta alternativa que no solo incluye las explicaciones de un guía en español, sino que ofrece entrada preferente para aprovechar al máximo el tiempo en la ciudad.

El itinerario propuesto en esta visita hace un recorrido por algunas de las zonas y colecciones de arte más destacadas de los Museos Vaticanos, como el Patio del Belvedere, la Galería de los Candelabros o la icónica Capilla Sixtina. Todo ello en compañía de un guía en español que irá desvelando muchas de las tramas y conspiraciones que han hecho popular este lugar más allá de su riqueza artística.

2. Visita guiada del Coliseo, Foro y Palatino

Aunque la ciudad está repleta de monumentos destacados, esta es una de esas excursiones en Roma que ningún viajero desea dejarse en la lista de cosas por hacer. El Coliseo, el Foro y el monte Palatino son tres de las localizaciones más destacadas de la capital italiana, y sus más de 2.000 años de historia resultan clave para entender cómo era la vida en la Antigüedad.

El recorrido tiene una duración aproximada de 3 horas que permiten conocer en profundidad las particularidades de la Roma Imperial. Comienza en el Coliseo, un anfiteatro con capacidad para 50.000 espectadores que está considerado una de las siete maravillas del mundo moderno; continúa por el Palatino, una de las siete colinas de la ciudad y lugar de residencia de los nobles, y termina en el Foro, centro neurálgico de la vida política y social de todo un imperio.

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3. Excursión a las Catacumbas y la Vía Appia

Los tesoros históricos de la ciudad imperial se extienden más allá de sus muros. El ejemplo más cercano es el de las catacumbas, galerías subterráneas que durante varios siglos fueron empleadas como lugar de enterramiento y que hoy conforman un laberinto de más de 150 km excavado en la piedra.

La mayoría de las 60 catacumbas de la ciudad se encuentran bajo la Vía Appia, una de las calzadas más importantes del Imperio, a cuyos flancos se erigen otros monumentos y construcciones destacadas como la capilla de Quo Vadis o las termas de Caracalla. Las explicaciones del guía servirán para poner en contexto la importancia de toda esta zona y para conocer los detalles más relevantes de las catacumbas y de otros puntos de interés como la Basílica de San Sebastián y la de San Pablo, también incluidas en la visita.

4. Excursión a Nápoles y Pompeya

Aunque los atractivos de la ciudad son inagotables, merece la pena desplazarse por los alrededores para tener una visión más amplia de la historia y la cultura de Italia. Por la localización estratégica de la capital, las excursiones desde Roma a lugares vecinos como Nápoles y Pompeya resultan muy cómodas, y la visita se puede completar en una única jornada de viaje.

El traslado hasta Nápoles dura unas 3 horas y atraviesa los magníficos paisajes de la campiña italiana y los Castelli. Ya en la capital de Campania, la visita comienza con un tour por la ciudad, recorriendo lugares emblemáticos como la Piazza del Plebiscito o la Galería de Humberto I, y haciendo parada para degustar la auténtica pizza napolitana antes de continuar la marcha hacia Pompeya y su sobrecogedora historia. El recorrido guiado por la ciudad sepultada por las cenizas del Vesubio tiene una duración aproximada de 2 horas y es el último punto de vista antes de regresar a Roma.

5. Excursión a Florencia en tren alta velocidad

La cuna del Renacimiento nunca había estado tan cerca de la capital de Italia como ahora. Gracias a los trenes de alta velocidad, hacer una excursión desde Roma hasta Florencia supone apenas una hora y media de trayecto.

Esta rápida forma de desplazamiento permite aprovechar cada minuto de la visita a Florencia, una ciudad que ofrece infinidad de posibilidades. La excusión comienza con un recorrido por el centro histórico y lugares clave como el Ponte Vecchio o la catedral de Santa María del Fiore.

Tras esta primera toma de contacto, habrá tiempo libre para visitar museos y galerías por libre o contratando visitas opcionales a otros puntos de interés como la Galería Uffizi o la Galería de la Academia, donde se encuentra el icónico David de Miguel Ángel.

6. Excursión a Siena, San Gimignano y Chianti

La región de la Toscana está salpicada de localidades pintorescas donde abundan la belleza y las tradiciones. Las excursiones desde Roma ofrecen la oportunidad de conocer la faceta más rural del país, protagonizada extensos campos de cultivo de uva y girasol.

La visita comienza por San Gimignano, ciudad medieval ubicada en lo alto de una colina y rodeada por murallas que llevan en pie desde el siglo XIII. Desde sus miradores se pueden divisar los viñedos con los que se elabora el famoso vino Chianti. De hecho, la segunda parada de la excursión será la visita a una de sus bodegas para degustar su producto más insigne. La tarde estará dedicada por completo a la ciudad de Siena y a conocer maravillas arquitectónicas como la Piazza del Campo o el Duomo, declarado Patrimonio de la Humanidad.

7. Excursión a Asís y degustación de vino Chianti

La singularidad del paisaje de la Toscana también se extiende hacia el este del país, donde son populares las excursiones desde Roma a Asís, un importante destino de peregrinación en mitad de la región de Umbría. La zona no solo es conocida por su arquitectura religiosa, sino por su gastronomía, por lo que esta excursión es una propuesta repleta de sabor.

Comienza con una cata de vinos acompañada de quesos, bruschettas y embutidos típicos de la zona como paso previo a la visita a la ciudad y a los lugares más representativos en la vida de San Francisco. Aparte de recorrer las calles de la localidad, la Piazza del Comune o el templo romano en honor a Minerva, también está incluida la visita a la basílica de San Francisco y a Santa María degli Angeli, antes de regresar a Roma con muy buen sabor de boca.

8. Tour de 5 días por Italia

Una forma alternativa de realizar excursiones desde Roma sin dejarse nada en el tintero es optar por un tour de varios días. Con 5 días de viaje y 4 noches de alojamiento hay tiempo más que suficiente para no perderse ninguno de los must del país transalpino.

Este tour de 5 días por Italia realiza un recorrido por la mitad norte del país, atravesando toda la Toscana y realizando paradas en Asís, Siena, Florencia, Bolonia, Padua y Venecia. Es la opción más recomendable para conocer los principales monumentos de Italia en un tiempo récord, combinando las visitas guiadas con las horas libres para disfrutar del viaje de un modo más pausado.